Corpus de inscripciones latinas de Cáceres III. Capera

El tercer volumen de Corpus de Inscripciones Latinas de Cáceres corresponde al territorio de Capera, un espacio ubicado en el norte de la provincia que surgió en tierras vetonas al amparo de la Vía de la Plata. Comprende zonas claramente diferenciadas por su evolución geológica. 

La ciudad de Capera se asienta sobre terrenos terciarios y cuaternarios que constituye la cubeta del Alagón, que por el norte penetra en la región escarpada constituida por la gran barrera montañosa del Sistema Central; y por el sur las "tierras pardas" asociadas a la zona de penillanura.

El nombre de la ciudad, Capera, Capara o Capasa, no es romano por lo que debe tener su origen en un topónimo indígena existente en las cercanías. Las ruinas de la actual Cáparra en la dehesa de Casablanca se localizan en una zona llana junto al río Ambroz que no reúne las características topográficas de los poblados prerromanos. Quizás por ello la Arqueología no ha podido confirmar la existencia de un asentamiento anterior a su conformación como ciudad romana.

La Capera romana, nace como entidad estipendiaria, una más entre las mencionadas por Plinio en su descripción de las entidades de población de Lusitania. Sus comienzos corren paralelos al diseño del tramo de la calzada ab Emirita Asturicam, por lo que es muy posible que su construcción se proyectara como un elemento más de la vía, la quinta mansio situada a 110 millas de la capital. Así se explicaría que esta arteria se integrara en su urbanismo como decumanus maximus y que su trazado ortogonal estuviera en función de la misma.